Posteriormente conoció al bailarín Amir Thaleb y empezaron a trabajar juntos por toda Argentina. Más tarde bailaría también con Maiada, Natalia y la hermana de Amir Thaleb, Alejandra.
Abandonó el flamenco para dedicarse de lleno a la danza oriental y visualizó todo tipo de vídeos de bailarinas célebres como Naima Akef, Samia Gamal, Tahiya Carioca, Nagwa Fouad y Fifi Abdou para enriquecer su estilo. Se formó como profesora y realizó espectáculos en compañía de sus alumnas, algunos de ellos para personajes relevantes de Argentina.
En 1992 viaja por Europa, Grecia, Turquía y Egipto, y gusta tanto a los propietarios del hotel Hilton , en la península del Sinaí, que le ofrecen un contrato por seis meses, que no solo aceptaría sino que renovaría, y tuvo tal acogida por el público, que se quedó en Egipto, pasando poco despues a actuar en El Cairo.
Se ha acusado a Asmahan de ser una copia de Dina, pero ella ha desarrollado su propio estilo mezclando el estilo árabe con un toque latino. Es una bailarina enérgica, dulce y muy expresiva, de gran creatividad y seguridad en si misma.
Asmahan ha pasado en la actualidad a ser un atractivo turístico de Egipto, presentando sus actuaciones a los turistas y siendo mucho más accesible que otras artistas como Randa Kamel o Dina.