Hace un par de días Cristina Gadea lanzaba a los cuatro vientos una preguntita entre sus amiguetes de facebook que suscitó mi interés junto con el de otras compañeras, y una vez más entré en un pequeño debate que he querido trasladar en cierto modo hasta aqui para ofrecer de nuevo mi opinión abiertamente para todos y sobre todo para que Cristina no me mande a esparragar por soltarle en su muro un testamento propio de la historia interminable.
Cristina nos preguntaba si creíamos positivo o negativo el hecho de que muchas veces coincidieran tantos espectáculos o eventos de danza oriental al mismo tiempo.
Yo contesté que personalmente
lo veo como algo positivo, pues creo que es bueno tener variedad de
espectáculos donde el público pueda elegir, enriquece el sector en
el sentido de que mientras hay oferta, la danza se hace notar
más. Pero expuse al mismo tiempo otro tema, y es que considero que lo que sí que deberíamos preguntarnos es si hay público
para este tipo de espectáculos.
Creo que todavía nos
queda mucho por andar, porque la danza oriental y
tribal en España es todavía bastante desconocida y el público se centra
demasiado en familiares y amigos de bailarinas, bailarinas amateur, estudiantes de danza y bailarinas profesionales. Digamos que lo tenemos
aún un poco en un "yo me lo guiso yo me lo como", de ahi la importancia de
la disfusión.
Pero tratar de llamar la atención a la gente
hacia un mercado donde a penas hay donde elegir es siempre más
dificil, por ese motivo me parece interesante el hecho de que haya cada vez más eventos de danza oriental o tribal y pienso que hay que preocuparse más de expandir que
de limitar.
Cuando se organiza un evento, sea profesional o no, tendemos a pensar de una forma un tanto egoista. Todos
queremos por supuesto que lo que hacemos tenga éxito
y por tanto vamos a buscar las mejores condiciones para realizarlo, se suele preferir que sea en fin de semana
para que pueda ir más gente a vernos, a ser posible con buen tiempo, en
un lugar apetecible, etc y se intenta que no coincida con otros eventos que puedan restar interés por
nuestra actividad, pero claro, ocurre que la danza
oriental y tribal en España no es precisamente la niña bonita del arte ni de la
danza, es decir, si ya el arte está muy devaluado y despreciado
últimamente por muchos, no digo nada del nuestro, muchos teatros por ejemplo dan prioridad a
otros eventos y a los artistas de danza oriental les dejan las migajas para poder encajar su apuesta.
Luego hay otras actividades como por ejemplo el
fútbol, que limita las agendas una barbaridad por mucho que nos reviente el
tener que reconocerlo, ¿que pasa al final? pues que entre pitos y
flautas al final todo el mundo visualiza como adecuados unos poquitos
días que no dan para tanto y claro, se coincide. Por mucho que no
quieras colocar tu fecha coincidiendo con la de otro compañero, al final no te quedan tantas
opciones, porque todos quieren las mismas fechas.
Añadid a esto que aunque podamos conocer medianamente la agenda de algunos amigos, no siempre conocemos la agenda de otros que no están entre nuestro círculo cercano.
Bien, ¿y que pasa cuando se coincide en las fechas? ¿porque algunos ven este tema como negativo? pues porque dado lo que antes comentaba de que el público es bastante limitado, este se reparte y no se llenan esos espectáculos como para cubrir gastos o que sean rentables, con lo que se empiezan a despertar las fobias a la competencia de muchos. Sin embargo yo siempre he defendido que la competencia bien entendida, pensando un poco y sin tenerla miedo puede ser también tu mejor aliado.
Sucede por supuesto que cuando un espectáculo o evento no tiene el éxito deseado sus organizadores empiezan a preguntarse el porqué y surgen entonces muchas opiniones diversas de los motivos que hacen que la danza oriental no crezca en este sentido como para que se llenen los teatros, salas, etc.
Algunos dicen que es la falta de profesionalidad de los bailarines o la calidad del espectáculo lo que hace que cada vez haya menos público, ya que el público termina aburriéndose, pero no puedo estar más en desacuerdo con esto. Hay que tener en cuenta que los eventos y espectáculos no solo son de caracter profesional, también hay otros que son amateur, semiprofesionales o mixtos. Tan respetable es un espectáculo profesional, como un festival de alumnos, o una hafla donde se mezcla gente que empieza con gente experimentada, todo el mundo tiene derecho a ofrecer su propuesta y lo más importante, os puedo garantizar que yo he visto personalmente como eventos de baja calidad han sido todo un éxito entre el público y otros de gran calidad no han tenido la acogida esperada.
Creo que lo que hace que un público se aburra no es necesariamente
la falta de profesionalidad , sino el contemplar algo que no se adapte a
lo que va buscando, de ahi que sea tan importante no engañar a la gente con la descripción de los eventos. Lo que hace que el público rechace algo es fundamentalmente que se sienta engañado. Si yo voy a ver bailar a mi amiga Manuela por 3 € en un fin de curso en su primer año, puedo disfrutar del espectáculo más que nadie apreciando su esfuerzo como principiante y dejándome contagiar de toda su ilusión, pero si me venden un espectáculo por 20 € como la octava maravilla del mundo con grandes estrellas internacionales y luego salen ocho bailarinas novatas haciendo el pato mareado, y una del barrio de la Estrella que sabe decir "Yes", lo más normal es que me acuerde de la santa madre del que organizó el espectáculo y no vuelva más.
Cuando hablamos
de un espectáculo profesional creo que son muchas las cosas que se
deben tener en cuenta, evidentemente aqui la profesionalidad si es imprescindible, y una muy importante que no todos tienen en cuenta es un estudio del mercado y el público, evidentemente si no hay público para un
espectáculo o no es el adecuado a un formato, no sirve de nada montar un
evento magestuoso, porque se comeran los mocos, y montar un espectáculo
profesional bueno supone también invertir mucho dinero, por tanto, quien
tenga el valor de montar algo profesional, sabe que con ese público que
comentábamos antes de familiares, amiguetes y alguna compañera no basta
y hay que molestarse en ampliarlo.
Pero para ampliar ese
público aqui en España creo que no basta con gastarse la pasta en
campañas de marketing, pubicidad o similares (que algunos ni eso hacen), sino que hay que crear
cultura, sin ella la gente no sabra apreciar este arte, no hablo de que
tengan que ser expertos eh, simplemente una mínima cultura general al
respecto que les lleve a pensar que lo que van a contemplar merece la
pena, sino será como si anuncio mañana "gran espectáculo de gamusinos".
Hay que estar dispuesto a ofrecer más información gratis de la que se
da, no solo pensar en pillar clientes para escuelas de danza. Formar
bailarinas está muy bien, o dar clases para pasarlo bien , pero muchas
veces nos olvidamos de formar público, no todo el mundo quiere bailar,
hay que ofrecer también información a quien solo quiere mirar para crear interés, para que entiendan el valor de lo que ven, para que se enganchen.
De poco valdrá desde luego quejarse de que me han montado al mismo tiempo cuatro pequeños
eventos más que me han robado MI PUBLICO como si este fuese una posesión
al más puro estilo del anillo de poder de Gollum.
Yo desde luego celebro que haya cada vez más eventos de danza de todo tipo y condición mientras no falten a la verdad y solo espero que cada vez haya también más público que disfrute de la danza. Os invito a todos a que como yo trato de hacer con este blog, difundáis la información, que no se quede solo entre los que bailamos, que llegue a todo el mundo.